El calzado minimalista busca imitar la pisada natural del pie descalzo. La idea es que, al quitarte de en medio la amortiguación y otras partes rígidas de la zapatilla, permitiendo que el pie vaya más libre y funcione de manera más natural y se fortalezca con el tiempo.
Esto ha llamado la atención de muchos crossfiteros, un deporte que requiere sin duda un buen control del cuerpo y una buena estabilidad para practicarlo con éxito y sin peligro.
¿Es perjudicial entrenar crossfit con zapatillas minimalistas?
La respuesta rápida es no… pero con matices. Si tu estructura muscular y articular está sana, entrenar con zapatillas minimalistas no es perjudicial, y además puede ser beneficioso a medio y largo plazo. Sin embargo, si tu caso es el contrario y tienes problemas articulares, fascitis plantar o debilidad en la musculatura del pie, lanzarte de golpe al minimalismo es sin duda una mala idea.
El principal riesgo está en la transición. Pasar de unas zapatillas acolchadas a unas minimalistas sin una adaptación previa (y hecha con cautela) puede generar sobrecargas, dolores e incluso lesiones. ¿La clave? Ir poco a poco, respetando la capacidad de adaptación del cuerpo.
¿Verdad que el primer día de gimnasio no levantaste 100kg en press de banca? Con esto igual, poco a poco y con adaptación.

Impacto en el rendimiento y la salud
Aquí es donde las cosas se ponen interesantes. A corto plazo, la falta de amortiguación puede jugar en tu contra. Si estabas acostumbrado a la ayuda extra de unas zapatillas acolchadas, al principio notarás que debes hacer un esfuerzo mayor para absorber impactos y estabilizarte. Es normal que sientas fatiga en los pies y en los gemelos tras los primeros entrenamientos.
Pero a medio y largo plazo, la historia cambia, a favor del calzado barefoot. Al fortalecer toda la cadena muscular del tren inferior (pies, tobillos, gemelos y hasta la cadera), tu cuerpo va a adaptarse y empezar a funcionar de manera más eficiente. ¿Por qué? Muy sencillo, tu pisada va a ser más natural, vas a recibir toda la información del suelo a través de tus pies, lo que da feedback al resto de músculos, y poco a poco todo vuelve a su sitio.
Esto puede traducirse en una mejor postura, menos riesgo de lesiones y una mayor propiocepción (percepción de tu postura, entorno, coordinación, etc. en pocas palabras ‘saber moverte’), lo que mejora el control sobre tus movimientos en ejercicios como sentadillas, levantamientos olímpicos y saltos.
Si quieres profundizar más en los beneficios del calzado minimalista en el gimnasio, échale un ojo a este artículo.

Mejores modelos de zapatillas minimalistas para CrossFit
Si después de ver los pros y los contras que te acabo de mostrar quieres probar el calzado minimalista, la elección del modelo adecuado es importante.
Tienes miles de opciones, pero yo te muestro dos categorías básicas y un buen ejemplo de cada una de ellas que te recomiendo:

Saguaro Vigor II
Modelo que cumple bien en entrenamientos. Ligero, flexible y con una suela fina que te da una gran sensación del suelo.
Buena para empezar sin gastar demasiado (algo más de 40€)

Merrell Vapor Glove 6
Modelo premium, duradero, fiable, de alta calidad y que resiste el paso del tiempo siendo una de las líderes del calzado minimalista.
Sin duda una compra para no fallar. (Entre 70 y 80€)
Si das el paso al calzado minimalista, recuerda que la transición es muy importante. Empieza con sesiones más cortas y cuidadosas. Yo empecé andando con minimalistas 15 min, poco a poco fui subiendo, y al cabo de mes y medio ya hice mi primera ruta de senderismo con minimalistas.
Escucha a tu cuerpo y dale tiempo para adaptarse. La paciencia marcará la diferencia entre una experiencia frustrante (y esperemos que no lesiva) y un cambio positivo para tu rendimiento y salud que te hará sentir satisfacción.